Tristeza

Ahí, a la derecha de la portada del blog tengo los sitios a los que visito con alguna frecuencia. Más que como recomendación (quién soy yo para recomendar algo) funcionan como atajo, como machete. Los tengo a mano todos juntos.
La mayoría de los autores de esos sitios son personas a las que no conozco de forma analógica: no hemos compartido mates ni vinos. Sin embargo compartimos cosas. A veces gustos, a veces palabras escritas, imágenes, sonidos. A veces nada, puesto que yo los visito y ellos ni saben que existo.
Hoy me doy una vuelta por Sitios en el Corazón. En lo que va del año no había pasado por allí y lo que escribe Sergio siempre me gusta. Es canario, de Tenerife. No nos conocemos personalmente.
Y me encuentro que no es él quien escribe, sino Loli Iñiguez, su compañera.

Un adiós

Querido lector y seguidor de este blog:
Sergio Canadé, el autor, falleció el pasado miércoles uno de abril. Está claro que no es él quien escribe sino que me he atrevido a hacerlo yo, su esposa y compañera, porque siento que aunque su vida haya sido arrebatada, su espíritu y su obra permanecen y sus lectores y seguidores merecen una aclaración.
Él dedicó incontables horas, amor y pasión a la elaboración de este blog y me parece injusto que se acabe de una manera tan brusca. Trataré de dar respuestas a sus preguntas si las hubiese y dedicaré un tiempo a mantener su memoria ya sea en este mismo espacio o en otro nuevo. Aun es muy pronto para mí… tiempo de duelo no de tomar decisiones.

Desde hace mucho tiempo conservábamos en casa una vara de lo que había sido una orquídea, pelada, seca; muchas veces he estado a punto de tirarla pero la conservé y la seguía regando. Unos días antes del final la planta empezó a echar unos capullos que Sergio alcanzó a ver. El miércoles se abrió una flor y el jueves otra. ¿Cómo puedo contemplar esa belleza?

Loli Iñiguez. 4-abril- 2015