Caminando hacia Sudakia con la China pasamos por una bulonera en la calle 28.
Yo necesitaba un buje para una sierra circular y ella un tornillo de medida especial para reparar un antiguo sacapuntas a manija.
De entrada el bulonero/ferretero nos miró horrible. Solo sonrió cuando pudo constatar que no tenía lo que necesitábamos.
Salimos desairados. Pero afuera, en la vereda de enfrente, nos esperaba el espíritu salvador de los inundados.
Imposible abarcar a esta entidad en una sola toma fotográfica.
Le pedimos por los de Luján, por los de Córdoba, los de Santa Fé, los de Entre Ríos, los de Catamarca, Santiago del Estero y por los del sur en Neuquén y Río Negro. Y nos fuimos.
No encontramos a Sudakia, pero en la bulonera de 15 y 55 conseguimos el buje y los tornillos. Volvimos sobre nuestros pasos.
El espíritu salvador ya no estaba. Mucho laburo en estos días.
Muy buena la fotocomposición. Si Ud. no aclaraba hubiese pensado que era una esquina; un poco extraña, eso sí. Los murales de Luxor tienen ese magnetismo del color vibrante. Es imposible no mirarlos. Ojalá el espíritu escuche sus (me sumo, nuestros) ruegos.
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Si. Quedó rara, parece una extraña ochava. La equina comienza a partir del palo de la derecha.
El espíritu escucha.
Abrazo
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